Formación con herramientas tiflotecnológicas

 Para el uso de la tiflotecnología se debe analizar previamente la manera correcta  de  introducir  a  las  personas  con  discapacidad  al  uso  de  estas tecnologías, dado que el desconocimiento de ello puede generarles apatía o disgusto y perder el interés para utilizarlas.La inmersión a estas nuevas tecnologías tiene como objetivo facilitar que personas con discapacidad visual se adapten al uso de los equipos de  cómputo  sin  ninguna  limitación. 

 

Por tanto, las ventajas van asociadas a la autonomía en los procesos diarios que ellos desarrollan. La  educación  presencial  ha  generado  trabas  y  sesgado  la  fluidez  del proceso enseñanza-aprendizaje de las personas con discapacidad visual porque la perspectiva de igualdad no es tenida en cuenta en las prácticas pedagógicas. Se desconocen las habilidades del sujeto, lo cual se torna en una barrera social. Por  lo  anterior,  la  educación  adquiere  gran  importancia  en  el  ámbito educativo y también laboral, ya que desde este medio y con la evolución de la era digital, todos (sin prejuicio alguno), acceden a cualquier tipo de herramienta que genera bienestar sin estar atado al sentido de dependencia. 

 

Es necesario tener en cuenta que para aprovechar al máximo el potencial de las tecnologías la escuela debe emplear nuevos modos de enseñanza y  conocer  qué  papel  juegan  las  TIC  en  la  educación  de  personas  con capacidades  especiales,  cuáles  son  sus  posibilidades  de  acceso  y  en  la posibilidad de formar parte de la “sociedad de la información” como un ciudadano más.

 

Esa tecnología está disponible en los entes educativos; sin embargo, por el desconocimiento de su utilización y una pedagogía inadecuada, no es adaptada e implementada. Es decir, en algunos casos las orientaciones académicas  se  dan  de  la  misma  manera  a  todo  el  estudiantado  sin  establecer unos estilos y ritmos de aprendizaje con recursos especiales dadas  las  condiciones  de  cada  persona. Las personas somos diferentes y, en consecuencia, el sistema educativo debe  ser  lo  suficientemente  flexible  como  para  acomodarse  a  las particularidades individuales, de modo que las tenga en cuenta a la hora de diseñar el modelo más ajustado a estas.

 

Formación docente

 

Existirán  unas  competencias  del  docente  para  una  educación  inclusiva con  apoyo  de  la  tiflotecnología  para  generar  una  participación  activa, colaborativa e interactiva del estudiante; por ello, el cuerpo de docentes, de manera voluntaria, implementará en sus labores diarias la utilización de software (magnificadores de pantalla, Jaws, NVDA, ORCA y VoiceOver), recursos didácticos, actividades sonoras, hápticas, cinestésicas, aprendizaje del braille, hardware (impresora braille, grabadora digital, línea braille, lupa electrónica, ábaco y calculadora parlante).

 

Sin  lugar  a  dudas  es  compromiso  de  los  centros  educativos  dar  al docente las herramientas pedagógicas e infraestructura tecnológica para hacer efectiva la inmersión a una pedagogía inclusiva y así ofrecerle al estudiante una calidad académica a través de sus programas de formación. Por consiguiente, un aspecto por abordar son las capacitaciones al cuerpo de docentes con temas de orientación, movilidad, lectura/escritura braille y habilidades para la vida que generen autonomía en los procesos diarios de los estudiantes por medio de herramientas tiflotecnológicas.

 

No obstante, presentar un proceso de capacitación al docente requiere la voluntad de todos; es un asunto de concientización y alteridad. En las manos del docente está la responsabilidad de sacar adelante al estudiantado, dado que con sus conocimientos, experiencia profesional y pedagogía utilizada puede crear escenarios de educación inclusiva con estudiantes íntegros para la sociedad. Por tanto, el docente inclusivo debe tener unos valores esenciales y competencias:

 

• Valorar positivamente la diversidad del alumnado: las diferencias entre los estudiantes son un recurso y un valor dentro de la educación.
• Apoyar a todo el alumnado: los docentes esperan lo mejor de todos sus alumnos.
• Trabajar en equipo: la colaboración y el trabajo en equipo son métodos esenciales para todos los profesores.
• Desarrollo  profesional  y  personal: la docencia es una actividad de aprendizaje y los docentes tienen la responsabilidad de aprender a lo largo de sus vidas.

 

Estos valores y competencias son aspectos relacionados con las normativas del ente educativo, amparado bajo el modelo pedagógico inclusivo con políticas de igualdad de oportunidades, cuya finalidad es eliminar barreras en los entornos educativos.